Una biopsia de piel es un procedimiento en el que se extrae una pequeña porción de piel. La piel es la fuente para obtener un grupo de celulas conocidas como fibroblastos. Estas células serán criopreservadas hasta el momento de su uso en una eventual clonación.
Biopsia de piel en mascotas vivas:
Extracción de tejidos en mascotas ya fallecidas
Los fibroblastos son células clave en la conservación genética de mascotas debido a su facilidad de obtención, capacidad de proliferación, y el hecho de contener todo el material genético del animal. Su uso principal es en la criopreservación y la clonación, permitiendo la posibilidad de conservar o replicar a un animal en el futuro.
Descubre la importancia de los fibroblastos
El cultivo celular de fibroblastos es una técnica esencial para la conservación genética y clonación, proporciona una fuente viable de células somáticas que pueden ser preservadas a largo plazo y usadas en técnicas de clonación avanzada.
Porque cultivar los fibroblastos
La criopreservación de fibroblastos es una técnica que permite conservar estas células vivas a temperaturas extremadamente bajas (En nitrógeno líquido a -196 °C), para ser utilizadas posteriormente en la clonación. La criopreservación mantiene los fibroblastos en un estado inactivo, permitiendo su almacenamiento a largo plazo sin que se deterioren, preservando así su capacidad para ser utilizadas cuando sea necesario.
Como es la criopreservación de fibroblastos
El cultivo celular de fibroblastos es una parte crucial de la clonación mediante la técnica de transferencia nuclear de células
somáticas (SCNT). El cultivo para clonación, es un proceso biotecnologico consitente en una serie de cuidadosas pasos, que culminan
en la reprogramación del material genético de la célula original de la mascota, con el fin de crear un embrión clonado.
Fuente de fibroblastos: Los fibroblastos se pueden obtener a partir de una biopsia de piel u otros tejidos conectivos de la mascota donante. La piel es la fuente más común debido a la facilidad de acceso y la abundancia de fibroblastos en el tejido conectivo.
Aislamiento: El tejido se disgrega mecánica y enzimáticamente para liberar los fibroblastos. Se suelen utilizar enzimas como la colagenasa o la tripsina para descomponer la matriz extracelular y facilitar la liberación de las células. Luego, los fibroblastos se aíslan mediante filtración y centrifugación para separar las células del resto de los componentes del tejido
Medio de cultivo: Los fibroblastos se cultivan en un medio de cultivo rico en nutrientes que proporciona los factores de crecimiento y las condiciones necesarias para que las células proliferen. Un medio común es el DMEM (Dulbecco's Modified Eagle's Medium), suplementado con suero, antibióticos y glutamina.
Los fibroblastos se cultivan en incubadoras que mantienen condiciones óptimas de temperatura (generalmente 37°C) y atmósfera (un ambiente con 5% de CO₂ para mantener el equilibrio del pH en el medio).
Monocapa de fibroblastos: Los fibroblastos en cultivo tienden a adherirse al fondo del recipiente de cultivo y crecen formando una monocapa. Las células se dividen hasta cubrir toda la superficie disponible.
Pases celulares o subcultivos: A medida que los fibroblastos crecen y cubren el fondo del frasco o placa de cultivo, es necesario realizar pases celulares. Esto implica separar las células mediante tratamiento con tripsina y redistribuirlas en nuevos frascos para permitir que continúen proliferando. Los pasajes celulares se numeran (P0, P1, P2, etc.), y los fibroblastos de pasajes más tempranos son más adecuados para clonación, ya que presentan menor riesgo de envejecimiento celular.